La Unión Progresista de Fiscales muestra su estupefacción ante el hecho de que, un año más, la publicación y resolución del último concurso ordinario de traslado coincida con el mes de julio y, por tanto, afecte de forma perturbadora los períodos vacacionales de los y las Fiscales, fruto de la imprevisión del Ministerio de Justicia, que pese a las reiteradas peticiones , no ha establecido un calendario reglado de concursos de traslado, lo que demuestra la falta de consideración hacia la Carrera Fiscal, que se ve correspondido con el lamentablemente escaso peso institucional de la Fiscalía General del Estado.
Resulta a todas luces intolerable que la publicación de la resolución de los concursos quede al arbitrio del Ministerio, el cual, en un ejercicio más de absoluto desprecio por la Carrera Fiscal decide dejar dicha publicación, como decimos, para mediados de julio. No podemos olvidar que durante este tiempo las Fiscalías se hallan desbordadas, con una plantilla reducida cubriendo a duras penas todos los servicios de los compañeros y compañeras ausentes. Por ello, el cese por traslado en esta época resulta devastador para la organización de nuestro trabajo, más aun cuando en los últimos tiempos se acude al régimen de sustitución forzosa entre la plantilla, en lugar de cubrirse las vacantes a través de la sustitución externa.
Esta situación, reiteramos, no hace más que abundar en el maltrato que el Ministerio viene dispensando a la Carrera Fiscal. Interminable es la lista de agravios, desde las inabarcables obligaciones que al Fiscal impone el sistema de plazos de instrucción, hasta la ineficaz e inoperante “Justicia Digital” que se trata de implantar sin importar los informes negativos recibidos y el rechazo generalizado de la Carrera, y que hemos denunciado en un recinte Comunicado. Como último ejemplo encontramos la convocatoria de la oposición para las Carreras Judicial y Fiscal, donde de 100 plazas convocadas se destina a abogados fiscales la ridícula cifra de 35 plazas , lo que demuestra el escaso interés del Ministerio de Justicia por el cambio de modelo procesal.
Debemos, por tanto, reclamar de nuevo la fijación de un calendario reglado de concursos y ascensos de publicación anual que nos proporcione certeza y seguridad. Hemos de recordar que ello afecta directamente a la conciliación de la vida personal, familiar y laboral de los fiscales, así como a las legítimas expectativas de promoción profesional.
Aprovechamos también para reivindicar un sistema de baremación real de las cargas de trabajo, y la implantación de un sistema automatizado de control de la productividad que disminuya las crecientes labores burocráticas que se vienen imponiendo a la Carrera, y que constituya un verdadero sistema de control del trabajo de cada una de las Fiscalías.
Albacete, 17 de Julio de 2017
El Secretariado Permanente.
