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En Barcelona, a 19 de mayo de 2009.

Sr. Ministro de Justicia.
Madrid.

Estimado Sr. Ministro:

Transcurrido ya cerca de un mes desde la reunión que representantes de las tres asociaciones de fiscales mantuvimos con Vd. el
pasado 21 de abril, el Secretariado de la Unión Progresista de Fiscales, al que represento, quiere ponerle de manifiesto una serie de extremos que consideramos preocupantes:

El primero, no haber recibido todavía el calendario de trabajo que el Ministerio se comprometió a diseñar para abordar aquellas cuestiones que en la reunión se fijaron como prioritarias dentro del contexto de diálogo que parecía estar abriéndose con las sociaciones de fiscales, encaminado a la ineludible tarea común de mejorar la administración de justicia.

En segundo lugar hemos sabido, con la comprensible sorpresa por nuestra parte, que en contra de lo que se nos dijo en la reunión del pasado mes de abril, algunos de los aspectos del diálogo y que afectan a la administración de justicia en su conjunto –y no sólo a colectivos específicos-, estaban ya siendo objeto de reuniones y propuestas concretas por parte del Ministerio a un colectivo  rofesional muy determinado, el de los jueces y magistrados.

Mayor ha sido nuestra sorpresa, si cabe, al conocer que, por ejemplo, se han formulado propuestas en materia de estructura retributiva de las carreras judicial y fiscal fuera del cauce institucional legalmente previsto al efecto, que es el de la comisión  contemplada en la Disposición Adicional primera de la Ley 15/2003. Llamativamente, se nos había dicho que no resultaba previsible la convocatoria de dicha comisión en breve plazo.

Nada tenemos que objetar, por supuesto, a que el Ministerio constituya foros de trabajo con colectivos profesionales determinados en lo que a éstos afecte singularmente. Ahora bien, abrir espacios de diálogo sobre elementos estructurales de la administración de justicia en los que no se tenga en cuenta a las asociaciones de fiscales -porque no se las integra en los mismos o se difiere su integración- supone, a nuestro entender, minusvalorar el papel crucial que el Ministerio Público desempeña en la justicia, señaladamente en la penal.

Acaso pudiera parecer que la posición de responsabilidad institucional mantenida, no sin desgaste, por las asociaciones de fiscales en los tiempos recientes ha supuesto en la práctica ver sus opiniones preteridas en la estrategia de modernización del sistema de justicia que el Ministerio, según se nos dice, pretende emprender.

Reafirmando, pues, nuestra disposición al diálogo constructivo, la Unión Progresista de Fiscales reclama retomar con premura la senda abierta el pasado 21 de abril y el cumplimiento, en suma, de los compromisos de trabajo allí adquiridos, en la forma acordada.
Reciba, Sr. Ministro, el testimonio de la más distinguida consideración institucional.

FDO.: Emilio Jesús Sánchez Ulled.
Presidente de la Unión Progresista de Fiscales.

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